¡Feliz año 2014!

Las compañías con la honda en sus manos retan al pastorcillo para que ejerza su derecho y designe libremente abogado y procurador, sabedora de que David tendrá que realizar inicialmente  desembolsos para el abogado, procurador, peritos y tasas judiciales, en su caso.

Acaba 2013 y con él un ciclo de 365 días. En nuestra cultura es norma aceptada mirar hacia atrás en cada fin de año para hacer repaso y examen de conciencia. En Tiquital no somos ajenos a esta reflexión y mucho menos en estos momentos tan dramáticos para dos millones de familias sin ingresos y para cinco o seis millones  de desempleados (depende de la fuente de información) atrapados por una voraz y devoradora crisis que se ceba cada día con los más necesitados. En esta crisis Goliat vence a David. La honda está en poder de los grandes grupos financieros causantes de la pobreza que campa a sus anchas y que  la visualizamos en las calles de nuestras ciudades o en el portal del edificio en el que vivimos.  Goliat le ha dado una pedrada al trabajo, a la percepción por desempleo, a la sanidad, a los servicios sociales, a la educación, al recibo de la luz, etc... En definitiva, a la esperanza y el futuro de mucha gente.  Las compañías de seguros tampoco desaprovechan la oportunidad y cuando el joven pastor David sufre un accidente de circulación  puede recibir una pedrada de Goliat en forma de oferta pírrica por los daños materiales y/o lesiones corporales. Las compañías con la honda en sus manos retan al pastorcillo para que ejerza su derecho y designe libremente abogado y procurador, sabedora de que David tendrá que realizar inicialmente  desembolsos para el abogado, procurador, peritos y tasas judiciales, en su caso.  Este desequilibrio entre el gigante y el pastor, que pertenece a los dos millones de familias sin ingresos o a los cinco o seis millones de desempleados, le genera indefención por falta de recursos y termina aceptando la pírrica oferta de la compañía.  En Tiquital somos conscientes de esta situación y por ello hemos llegado a un acuerdo con un despacho de abogados que cobrará al final del proceso con cargo la cobertura de Protección Jurídica: nunca del importe de la indemnización que perciba el cliente. Pretendemos que David recupere su honda. TIQUITAL